La propuesta de Joseph Tavárez de crear un premio en Santiago ha tomado una fuerza increíble, a juzgar por los aprestos que se hacen en la hidalga ciudad corazón.
Aunque algunos han visto la iniciativa con cierto recelo, lo cierto es que el orgullo regional de la gente de Santiago ha aflorado en la comunidad, y se manifiesta un respaldo creciente al propósito de que la región tenga su premio.
Ello así porque si tienen teatros, arena, canales de televisión, discotecas, clubes nocturnos, emisoras de radio de primera y una vida nocturna que en materia de bailes supera a la de la capital, por qué no pueden también tener un premio que valores, exalte y distinga a sus artistas, sin necesidad de tener que mendigar reconocimiento en la capital, donde hay mucha gente prejuiciada que se creen superiores a los del Cibao?.
Se considera que ya está bueno de que se continúe pisoteando la dignidad de una comunidad artística que crece y se desarrolla a niveles que nadie puede seguir ignorando.
Es decir, que aparte del disgusto que hay con relación a la premiación de Acroarte, y el descrédito en que ha caído bajo la actual presidencia, hay una necesidad muy sentida de plantar una bandera, que valore y dignifique a los artistas de Santiago.
El movimiento en torno al premio Monumental, como ya se ha dicho, ha tomado un vigor y entusiasmo inusitado.
Hasta se habla de que una importante empresa licorera de Santiago ha dado el visto bueno al nuevo premio, algo que es importante para cualquier evento de este tipo.
En los días y en los meses por venir, se verán muchas sorpresas. Oigan bien que lo decimos...
Mientras tanto, que siga la farsa y sus farsantes...Y si usted no encuentra palco, acomódese en las gradas, pero no se pierda el show que viene.
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