A seis años de que el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional dictara la sentencia sobre el caso Banco Intercontinental (Baninter), la población dominicana sigue preguntándose a dónde fue a parar la mayoría de los bienes de una de las quiebras bancarias más grande de América Latina, la cual generó un déficit fiscal al Estado dominicano sobre los RD$ 55 mil millones.
En la sentencia del 22 de octubre del 2007 todos los involucrados fueron hallados culpables de haber cometido los crímenes de ocultamiento, adulteración y abuso de confianza (entre otros delitos), en perjuicio de la sociedad y el Estado dominicano, hechos previstos y sancionados por la Ley Monetaria y Financiera 183-02, y el Código Penal, decisión que fue ratificada el 7 de noviembre de 2008 por la Suprema Corte de Justicia (SCJ).
El mismo tribunal había ordenado que los bienes del Baninter Pasaran al Estado a través de una comisión liquidadora designada por el Banco Central (BC). Entre ellos se encontraban decenas de emisoras de radio, varios canales de televisión, helicópteros, inmuebles, automóviles, solares, fincas, edificios y locales comerciales; así como la empresa operadora de televisión por cable Aster, los cuales, de acuerdo con la Ley Monetaria y Financiera debieron ser vendidos en subasta pública, con una puja inicial total que ascendía los RD$835,548, 910 millones.
Esa licitación fue convocada por el Banco Central a través del Comité de Políticas para la Realización de Activos (Copra). Los inmuebles estaban ubicados en el Distrito Nacional y las regiones este, norte y sur del país.
En el Distrito Nacional se encontraban las propiedades de mayor valor, siendo el principal un solar de 30 mil metros cuadrados situado en la calle San Antón esquina Luperón, cuya puja iniciaba con RD$520 millones.
A este le siguió el edificio ubicado en la avenida Abraham Lincoln, esquina profesor Núñez Domínguez, en el ensanche La Julia, cuyo precio inicial era de RD$167.5 millones y otro en la intersección de las avenidas Máximo Gómez y San Martín, con un precio inicial de RD$100 millones.
En total, en la Capital las autoridades pusieron en venta dos edificios y seis solares, cuyo costo era de RD$814.5 millones. En la región Este la Comisión de Liquidación subastó una finca en Monte Plata, a RD$3.3 millones, y un solar de tres mil metros cuadrados en San Pedro de Macorís, a RD$4,250, 000.
En el Cibao tenían en venta tres fincas y dos locales comerciales, que totalizan RD$6,521, 200, y en el sur, tres solares, a RD$6,803, 513.
A finales de junio del 2008, el BC trabajaba en la realización de un inventario de los medios de comunicación incautados del Baninter, para luego proceder a ofertarlos, tras la resolución de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), que ratificó la sentencia condenatoria contra los imputados.
Fidel Pichardo Baba, encargado de la Unidad de Fraude Bancario de ese organismo, negó para entonces versiones de que el empresario y periodista César Medina hubiera propuesto comprar los canales de televisión 13 y 27, como se comentó en algunos medios. El Grupo Telemicro adquirió la empresa Aster Comunicaciones mediante negociación directa con el Consorcio Energético Punta Cana-Macao, luego de una intensa campaña desarrollada por el primero sobre la supuesta venta a precio de “vaca muerta”. No se ha sabido el precio final de la transacción.
Telemicro había denunciado, antes de adquirirlo el primer grupo, que la primera puja por Aster Comunicaciones fue de 42 millones de dólares y que finalmente la empresa incautada al Banco Intercontinental (Baninter), fue vendida por 27 millones
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