Su historia pasó a la posteridad con la canción que Maná le dedicó, ahora, por fin ella y su amor están juntos -
Tristeza, melancolía y amor, todo en un solo tema. Sin embargo, esta historia era más que una canción.
La mexicana Rebeca Méndez Jiménez, la mujer que inspiró al grupo Maná, en el popular tema "El muelle de San Blas", murió el pasado viernes a los 63 años, tras una historia de vida dramática y triste.
Su amado Manuel era un pescador que se perdió en el mar el verano de 1971, una semana antes de su boda con Rebeca. Se dice que fue atrapado por una tormenta y nunca se encontró su cuerpo.
Esta teoría no fue suficiente explicación para la llamada “loca”, quien diariamente vestía su traje de novia y esperaba el retorno de su amado Manuel. Fue así, vendiendo dulces vestida de novia como conoció a Fher, quien conmovido por su historia le dedicó el ya icónico tema. Otra versión, menos romántica. Afirma que Rebecca padecía de algún tipo de trastorno mental.
Esta tenía una amistad con un vendedor de artesanía de nombre Ladislao y ella se vestía de novia diciéndoles a los pobladores que se iba a casar con él. Este hombre fue atropellado en Guadalajara y más tarde murió en Tepic, sin que a Rebeca le quedara claro tal suceso.
Lo cierto es que durante 41 años ella esperó por su amado, siendo su último deseo que sus cenizas sean lanzadas al mar.Los familiares en Monterrey, Nuevo León y Ahualulco, Jalisco, ya solicitaron al Ayuntamiento de San Blas las facilidades para cumplir con la última voluntad. Parece que luego de tanto esperar, Rebeca por fin va a tener su final feliz.
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