Nueva York - "Si te quieres divertir, con encanto y con primor, sólo tienes que vivir un verano en Nueva York", dice la canción que Eduardo Sarmiento repite y sigue al pie de la letra recordando al Gran Combo de Puerto Rico. Junto a su familia, Sarmiento dice haber gozado plenamente de la época veraniega en la Gran Manzana.
En los pocos días que quedan del verano, muchos neoyorquinos disfrutan al máximo de las actividades al aire libre. Y, antes que cierren las piscinas públicas y las playas, Sarmiento, de 29 años, en compañía de su pequeña hija Adriana, se dieron el último chapuzón de la temporada.
"En verano me divierto muchísimo, por eso prefiero los días de calorcito. Es divertido estar afuera y Nueva York es una ciudad que tiene muchas cosas", dijo Sarmiento, antes de entrar a la piscina pública del parque Astoria Heights, conocida como PS 10.
"Me da tristeza que se acabe el verano. El tiempo que falta lo voy a
aprovechar lo que más pueda, ya que dentro de unos meses llegará el frío", comentó el hispano.
Sin embargo, según Sarmiento, el invierno no es un obstáculo para seguir divirtiéndose con la familia.
"Hay que ver el lado positivo del frío. En invierno se puede esquiar y hay otras cosas qué hacer. Ni modo, se va el verano", indicó.
A Noemí Mendoza también le encanta pasar la temporada veraniega en la ciudad con su familia. Sin embargo, lamentó que este año, por la situación económica, no pudo llevar a sus nietos a la playa ni a los parques de diversión.
Pese a todo, Mendoza se las ingenió para pasear sin tener que gastar mucho dinero, llevó a sus seres queridos a las ferias callejeras, a los conciertos gratuitos, a las piscinas y a los parques.
"Lástima que ahorita finalice el verano. Estuvo bueno el tiempo. Los niños son felices en verano. En invierno, ellos no disfrutan tanto, porque son asmáticos", afirmó la mujer, en compañía de su hijo Víctor Moreno y sus inquietos nietos trillizos.
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