a japonesa Hitachi presentó esta semana un posible sustituto de los actuales discos ópticos, pequeñas láminas de cristal de cuarzo capaces de almacenar la información indefinidamente o, al menos, durante centenares de millones de años.
“El volumen de la información que se genera a diario se expande pero, en lo que concierne a su almacenamiento para futuras generaciones, no hemos progresado mucho desde la época en que hacíamos inscripciones sobre piedras”, señaló un ingeniero de Hitachi, Kazuyoshi Torii, citado por la prensa
japonesa.
Recordó que la vida de un CD o un disco duro se limita a varias décadas, un siglo a lo sumo, y el rápido desarrollo de las tecnologías conlleva frecuentes cambios de lectores de datos.
La posibilidad de perder la información ha incrementado, según Torii, pues en algunas ocasiones simplemente no logramos recuperar los datos guardados.
Hitachi propone almacenar datos binarios en cuatro capas de puntos impresos dentro de una pequeña lámina de cristal de cuarzo. Su lectura siempre será posible con la ayuda de un microscopio óptico, independientemente de lo mucho que avancen los ordenadores.
Cada lámina es un cuadrado de dos centímetros y apenas dos milímetros de grosor que está hecho de cristal de cuarzo, un material resistente al agua, muchos compuestos químicos y, durante al menos un par de horas, temperaturas de hasta 1.000 grados Celsius. En cada hoja caben unos 25 Mb pero es posible ampliar la memoria aumentando el grosor.
“Creemos que los datos sobrevivirán, siempre y cuando no se rompa este cristal duro”, dijo otro investigador de Hitachi, Takao Watanabe.
Hitachi no ha resuelto aun cuándo pondrá en circulación su nueva tecnología. Para empezar, según los investigadores, podría ofrecer el servicio de almacenamiento de datos a museos y organismos gubernamentales.
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