Su trabajo como obrero le quitaba varias horas del día para poder buscar a una pareja, entonces en un intento por dejar de pensar en el amor, se amputó el miembro, publicó el diario inglés Mirror.
Fue al hospital para recibir tratamiento, pero perdió mucha sangre por lo que nada pudieron hacer los cirujanos para salvar el pene.
Compañeros de Yang dijeron que estaba muy deprimido por el hecho que desde que se mudó
a la ciudad para trabajar en una fábrica textil no había encontrado novia.
Explicaron que las arduas jornadas en la planta ubicada en Xiaxing, en la provincia de Zhejiang, en el este de China, provocó que se acabaran sus expectativas de alguna vez conocer a una mujer.
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