¿No sería lo mismo chocar las manos, juntar las orejas, soplarnos la cara o
juntar hombro con hombro? ¿Qué es lo que hay detrás del beso en nuestra especie que lo hace tan especial? Las teorías para explicar el orígen del beso son muchas, y hoy en OjoCientífico hacemos un repaso por ellas.
Los científicos han estudiado este curioso comportamiento del ser humano durante décadas, sin llegar jamás a una conclusión universal y contundente. Hay quienes creen que el beso es una mera construcción cultural, el cual fue aprendido por algunos grupos a través de la necesidad de la transmisión de comida por parte de madres a hijos. La existencia de tribus que no se besan es prueba de ello.
Sin embargo, hay otros científicos que opinan que estas tribus inicialmente se besaban, y que fue la cultura lo que extinguió el hábito. Estos científicos son los que creen que el beso es un acto de carácter instintivo, el cual es anterior a la totalidad de nuestra especie. De hecho, hay otras especies (como los bonobos) que se besan esporádicamente.
Recientemente salió a luz una nueva teoría mucho más interesante, la cual afirma que las mujeres besan a los hombres para olfatear inconscientemente a un potencial compañero sexual. Las hembras humanas buscan machos que tengan un sistema inmune diferente al de ellas, para así tener crías más fuertes y sanas, y el beso sería una forma de asegurarse de que se está ante un compañero sexual saludable.
Claro que a la hora de besar las teorías no importan. Un beso es hermoso, y sobre eso no hay discusión científica. Además, observar al beso desde el rígido y racional punto de vista de la ciencia es algo que le quita todo su encanto inherente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario