SANTIAGO. Dos hombres fueron asesinados a tiros la madrugada de este miércoles en la zona Norte de esta ciudad, suceso que las autoridades estiman relacionado con el tráfico de drogas.
Gilberto Antonio Estévez Abreu (La Pava) y Denny Enríquez Rosario Tejada, alias “El Pájaro”, de 36 y 38 años, fueron acribillados en el interior de la casa número 27 de la calle Ñ, de Los Reyes.
Estévez Abréu vivía en el segundo nivel de una casa ubicada en la parte trasera de la calle H, en ese sector, en tanto que Rosario Tejada residía en el barrio Francisco del Rosario Sánchez.
Ambos fueron asesinados por varias personas que se presentaron al lugar a bordo de un vehículo; fallecieron por múltiples heridas por armas de fuego, estableció el forense que levantó los cuerpos.
Encima de una cama de la vivienda, agentes de la Policía Científica
hallaron una porción gruesa de un material rocoso, presumiblemente cocaína y siete casquillos y dos proyectiles mutilados para pistola calibre 9 milímetros.
La Policía informó hoy que Estévez Abreu había sido deportado de los Estados Unidos el 5 de agosto de 1995 y el 17 de mayo de 2006, por el delito de narcotráfico y en sus archivos figura con un amplio historial delictivo, matizado con cinco fichas por tráfico de drogas y una por robo de vehículos.
Esta mañana, la Policía aseguró en la vivienda donde se produjeron los hechos opera un punto de ventas y distribución de drogas narcóticas, propiedad del también narcotraficante Roberto de Jesús Collado Abreu, alias “Robert”, quien guarda prisión en el centro de rehabilitación y corrección Rafey, luego de haber sido apresado y sometido a la justicia por la Dirección de Control de Drogas.
Robert fue deportado hace varios meses de Estados Unidos y ha estado detenido en tres ocasiones.
Un apunte
Investigan caso
La Policía dijo esta mañana que inició una profunda investigación sobre las muertes de Gilberto Antonio Estévez Abreu (La Pava) y Denny Enrique Rosario Tejada (El Pájaro). Ambos fueron asesinados por varias personas que se presentaron al lugar a bordo de un vehículo; fallecieron por múltiples heridas por armas de fuego, estableció el forense que levantó los cuerpos. Encima de una cama de la vivienda, la Policía Científica halló una porción de un materia, presumiblemente cocaína y siete casquillos y dos plomos mutilados.
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