NUEVA YORK._ Un pandillero dominicano identificado como Angel Valerio (Cyph), de 20 años de edad, fue condenado a 15 años en la cárcel por su participación junto a otros gangueros criollos en el asesinato de la estudiante dominicana Aynis Vargas de 12 años de edad, el 15 de junio del 2013.
Antes de ser sentenciado, el pandillero, leyó una declaración en la que pidió disculpas a los padres de la víctima, diciendo que "el asesinato fue inexcusable".
Además de la estudiante, tres tías de ella, resultaron heridas de bala, cuando fueron impactadas por balazos, estando frente a un edificio de un complejo de viviendas públicas, en una fiesta de graduación.
Los pandilleros, atacaron a un grupo de presentes en la celebración, porque creyeron que un ganguero rival, estaba entre las víctimas y buscaban cobrar venganza por el asesinato de unos de sus cómplices, dijeron los fiscales.
Las dominicanas heridas son Vilma Tineo, Elaine D. Vargas y Eugelyn Cabrera Martínez, con las que estaba le menor que recibió un plomo en la cabeza, muriendo en la escena.
El abogado del pandillero, William C. Dimitri, hizo una apología de la vida del condenado, para justificar sus hechos, en la que dijo que Valerio, fue abandonado por su madre a los 13 años de edad, siendo amparado por amigos y finalmente cayó en la pandilla, a la que consideraba su "familia".
Añadió el jurista que el convicto, tiene siete medio hermanos, con los que nunca ha convivido.
El Fiscal General Adjunto, James Baum, respondió que "esto, no se trata de un juego de video, sino de las vidas de víctimas inocentes, que caen a manos de la fuerza destructiva de las pandillas".
Pidió al juez imponer una sentencia que enviara un mensaje contundente a los demás pandilleros que siguen vertiendo sangre en las calles de Providence.
"El de las pandillas, es un deporte de sangre que termina con vidas inocentes, que como la de Aynis Vargas, quien tenía apenas 12 años de edad y era una estudiante sobresaliente en su escuela, era una inocente viviendo en un barrio y participando en una fiesta, una noche cálida de verano", expresó el fiscal Baum.
El juez Robert D. Krause de la Corte Superior de Providence, dijo que de los 15 años, Valerio tendrá oportunidad de servir 12 y después de cumplir la docena, solicitar libertad condicional.
En el asesinato de la estudiante, participaron otros cinco pandilleros, algunos de los cuales ya fueron condenados a cadenas perpetuas, entre ellos Branden Castro, quien se declaró culpable en abril como el tirador, Ricardo Vásquez, quien conducía el vehículo que abordaban los gangueros, Luis (Didi) González, quien se declaró culpable de asalto y conspiración y Luis (Fat Boy) González, quien fue declarado culpable por un jurado en junio por cargos de posesión de armas y asalto.
Los dos últimos, están a la espera de sus sentencias.
El padre de la menor asesinada, Teomel Vargas, declaró antes de la sentencia de Valerio, que su hija "era una niña inocente, dulce y feliz, y que ahora se había hecho justicia".
Añadió el papá de la estudiante que "cuando una persona comete un error por accidente, tiene que pagar, pero cuando lo hace intencionalmente, el castigo tiene que ser mayor".
Concluyó diciendo que "a veces, a las personas descarriadas, se les da la oportunidad de cambiar, pero en la mayoría de las veces, no están esa disposición y siguen arrastrando malicia en sus mentes y corazones".
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