NUEVA YORK._ La niñera dominicana Yoselyn Ortega, de 52 años de edad y nativa de Santiago de los Caballeros, quien confesó el viernes el asesinato de los niños Leo y Lucía Krim de 6 y 2 años, culpó, según documentos de la corte a los padres de los menores por homicidios, diciendo que "ellos me impulsaron a matarlos".
Ortega, quien trató fallidamente de degollarse, cuando la madre de las criaturas llegó al apartamento y la encontró en la bañera, con uno de los cuchillos en mano y un charco de sangre, se declaró como la verdadera "víctima".
Confesó, que acuchilló docenas de veces a ambos menores, porque los señores Kevin y Marina Krim, progenitores de las víctimas, no quisieron aumentarle el salario ni prestarle dinero, a pesar de los problemas económicos que ella tenía.
También achacó a los padres, el haberla obligado a limpiar diariamente el apartamento situado en un edificio de la céntrica calle 75, próximo a Central Park.
"Ustedes no saben que fueron ellos, los que me hicieron hacerlo, no saben lo que me hizo esa señora", dijo la niñera en una declaración de culpabilidad en la Corte Suprema Estatal de Manhattan.
Los niños fueron asesinados por Ortega en la bañera del apartamento donde residían con sus padres y una hermana que sobrevivió, porque en ese momento, estaba su escuela de ballet.
Los crímenes, fueron perpetrados por la dominicana el 25 de octubre del 2012 y desde entonces, se había declarado "no culpable", después que fuera acusada en lecho de cuidados intensivos en el hospital Presbiteriano Well - Cornell de Alto Manhattan.
"Trabajaba como niñera y ella (la madre), quería que yo hiciera todo", añade la declaración de la señora Ortega.
El juez del caso, Gregory Carro, ordenó otra audiencia para la admisibilidad de la confesión de la niñera santiaguera.
Ortega, hizo otras escalofriantes declaraciones en el tribunal en las que aseguró, que ella usó dos cuchillos para asesinar a los menores.
El examen forense, reveló que la niña, de quien la niñera dijo trató de defenderse de las puñaladas recibió 40 estocadas, quedando virtualmente desfigurada.
Confesó que el niño de más edad que su hermana, fue asesinado por ella, "sin poder hacer nada".
Una semana después de los homicidios, la niñera pidió a la policía, sintonizar uno de los canales de televisión en español para seguir la noticia de los asesinatos.
También repitió varias veces el nombre de la señora Krim.
La abogada de Ortega, Valerie Van Leer - Grenberg, planea seguir con la estrategia de la "demencia" para tratar de evitar que Ortega, se enfrente a un juicio, o sea condena a una larga pena, decisión que está en manos del magistrado Carro.
Se enfrenta a una pena mínima de una cadena perpetua, yendo a juicio, o declarándose culpable.
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