Ya si nos salvamos o al menos Omega ya se siente salvo. Supuestamente según su abogado el merenguero, quien guarda prisión en la cárcel de Rafey en Santiago se está convirtiendo en pastor evangélico dizque como una forma de regenerar su vida azotada por escándalos y controversias.
Tal como el músico y cantante Ramón Orlando, quien mientras alababa a Dios luego grabó un merengue nada ejemplar como "El Venao" en interpretación de su hermano que militaba en su orquesta.
Para Omega ser pastor evangélico no sólo deberá buscar el perdón de Dios sino de la gente con la que ha tenido líos, como el señor a quien supuestamente hirió de bala en un pleito en una plaza comercial y que lo mantiene en la cárcel de forma preventiva tras desacatar una orden de presentación periódica a la justicia.
fuente Juan Carlos Jimenez
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