Al tiempo que las calles inundadas se han convertido en balnearios y playas de expansión para bañistas y surfeadores, ha empezado la cuenta fatal de víctimas dejadas por la tormenta Sandy en la República Dominicana.
En el sector Los Prados, un joven remolcado por una jeepeta surfeó durante horas, mientras seguía lloviendo a cántaros sobre las calles anegadas de su barriada.
Un joven de 22 años fue encontrado muerto en las aguas del balneario Caganche de Caño Salado, en el municipio de Quisqueya, de San Pedro de Macorís.
Bernory Cruz a quien apodaban Lendoy, residía en la calle A del Barrio Guachupita de esa comunidad.
Se informó que acudió al lugar a visitar a una persona al momento de introducirse al balneario muriendo ahogado. El cadáver fue sacado a la orilla del referido balneario.
Mientras que otro joven fue reportado como desaparecido en el municipio de Higüey, tras lanzarse de un puente sobre el río Duey, para desafiar la crecida de la corriente.
Miguel Ángel Santana, de 21 años, se había arrojado al agua junto a otras dos personas que lograron salir de la desafiante peripecia; pero su familia aún continua sin tener noticias suyas.
El gobernador de La Altagracia, Ramón Güilamo Alfonso, activó en la zona el Centro de Operaciones de Emergencia para socorrer a quienes residen al margen del río Duey y Quisibani.
Los intensos caudales de ambos afluentes, y del arroyo Caguero, han provocado grandes inundaciones en los sectores Villa Cerro, Los Platanitos, Los Coquitos, La Florida, Soto Abajo, Los Rosales y San Martín.
Varias personas se vieron obligadas a autoevaluarse en casas de familiares y amigo debido a que sus viviendas quedaron anegadas; otras fueron internadas en el hospital público Nuestra Señora de La Altagracia.
Las autoridades de la región advirtieron que se mantiene la vigilancia ante la amenaza de que continúen aumentando el cause de los ríos.
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